La persona humana es el único ser racional que existe sobre la tierra, posee conciencia e inteligencia que le permite actuar discrecionalmente, actúa libremente tanto en su comportamiento, como en la elección de sus metas.
Si aceptamos la definición de "persona" que hemos dado, nos veremos obligados a admitir la posibilidad de la existencia de personas no humanas: individuos racionales y morales que pertenezcan a otras especies o a otros géneros, como los dioses, los ángeles, los espíritus descamados o los extraterrestres. Ninguno de ellos sería humano, pero podrían ser considerados personas si mostraran conciencia de sí mismos, racionalidad y capacidad moral.
La diferencia entre estos dos términos humano y persona viene en contradicciones desde mucho tiempo atrás. La moralidad de las personas de estratos sociales altos, su discriminación a personas que no poseen algún nivel de educación o que poseen problemas mentales no les da el derecho de ser llamados personas según ellos, ya que una persona es un ser humano que nace en un hogar moralmente establecido, y crece bajo unas reglas éticas en las cuales la educación es lo primordial.
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